¿Por qué mi perro huele a pescado?
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Seguramente, en algún momento, habrás notado un olor terriblemente desagradable proveniente de tu perro, especialmente de su trasero. Es un olor muy característico y desagradable que puede resultar desconcertante hasta el punto de preguntarse”porque mi perro huele a pescado?” En general, un olor a podrido oa pescado que sale del trasero de un perro se debe a un problema con las glándulas anales, falta de higiene u otras razones.
En este artículo de ExpertoAnimal te explicamos exactamente por qué se produce y cómo evitarlo, ya que puede ser síntoma de un problema o malestar que hay que tratar.
- El trasero del perro huele a pescado – Causas
- Problemas de las glándulas anales caninas – Síntomas
- Inflamación de las glándulas anales del perro y otros problemas
- Cómo vaciar las glándulas anales de tu perro
El trasero del perro huele a pescado – Causas
Para saber por qué el ano de tu perro huele a pescado, debes observar el glándulas perianales, que son dos sacos debajo de la piel ubicados a ambos lados del ano. Contienen un líquido aceitoso y viscoso de olor desagradable, que se expulsa para facilitar la eliminación de las heces. También funciona como una marca, mediante la cual los perros se saludan oliéndose el trasero.
A veces, estas glándulas pueden vaciarse por sí solas. cuando el perro esta muy asustado. De estas glándulas también pueden salir gotas que luego podemos encontrar en su caseta o en el suelo en forma de pequeñas manchas marrones. Este vaciamiento es causado por una fuerte contracción del esfínter anal. A veces este líquido no se borra correctamente y está en el origen de varios problemas, como veremos a continuación.
Problemas de las glándulas anales caninas – Síntomas
Entonces, la explicación de por qué los perros huelen a pescado, o más exactamente, por qué las nalgas de los perros huelen a pescado, es que las glándulas anales están funcionando mal.
Si esto ocurre, nuestro perro exhibirá lo siguiente síntomas:
- Arrastra el ano al suelo. En casos severos, sin embargo, el perro tendrá dificultad para sentarse y, si lo hace, se levantará rápidamente.
- se lame a si mismo y muerde la zona afectada.
- Prueba dolor al hacer las necesidades.
- Sufre de estreñimiento; en este caso el perro evitará la defecación porque esto le provoca dolor.
- Dar la vuelta para perseguir la cola.
- Su área perianal puede ser hinchado y/o rojo.
- Si se ha desarrollado una infección, pueden aparecer fiebre y malestar
El tratamiento inadecuado de este problema puede hacer que las glándulas queden llenas, lo que puede dar lugar a las patologías que se describen a continuación.
Inflamación de las glándulas anales del perro y otros problemas
Se no se vacían, Las glándulas anales del perro pueden causar los siguientes problemas:
- Oclusión o retención: significa que las glándulas quedan llenas y distendidas, por mal vaciamiento o líquido muy espeso, provocando los síntomas antes mencionados. Las glándulas necesitan ser vaciadas.
- Infecciones e inflamaciones (saculitis): la oclusión puede causar una infección. En estos casos, el olor a pescado procedente del trasero del perro será mucho más fuerte, la secreción se volverá amarillenta y, una vez diagnosticada, requerirá tratamiento antibiótico así como vaciamiento y limpieza. Por lo tanto, no es raro observar que el perro expulse líquido por el ano con las características mencionadas anteriormente.
- Absceso: es la tercera etapa después de la oclusión y la infección. La inflamación que produce la infección provoca un absceso que puede abrir la piel e incluso crear una fístula. El perro también puede tener fiebre. Naturalmente, se requieren antibióticos, drenaje y limpieza. En casos severos o recurrentes, puede ser necesaria una cirugía para extirpar las glándulas.
Como vemos, todas estas dolencias pueden explicar por qué nuestro perro huele a pescado, o más bien es su ano el que desprende este olor tan particular. Además, en las glándulas perianales pueden aparecer tumorescomo los adenocarcinomas. Estos pueden hacer metástasis al pulmón, aunque en ambos casos, ya sean benignos o malignos, se recomienda su extirpación quirúrgica. También se recomienda la esterilización porque favorece la regresión de los tumores, que se presentan con mayor frecuencia en varones intactos mayores de 7 años.
Cómo vaciar las glándulas anales de tu perro
Ahora que sabemos por qué el trasero de un perro huele a pescado, veamos cómo deshacernos de este desagradable olor. Las medidas a observar son las siguientes:
- Intervenir cuando el perro muestre los primeros síntomases decir, no esperes a que la situación se complique para acudir al veterinario.
- Si nuestro perro es propenso a acumular este líquido, debemos incluyen el vaciado de las glándulas en su rutina. Sin embargo, ¿cómo se vacían las glándulas anales de los perros? Si bien es una técnica que se puede hacer en casa, muchos cuidadores prefieren que la haga un veterinario o un peluquero. Consiste en presionar sobre la zona, cuidando de tener una gasa cerca del fondo para recoger la secreción que saldrá. Se deben usar guantes.
- Se sabe que las características de las heces influyen en la micción. Diarrea crónica, heces pequeñas o demasiado blandas que no ejercen suficiente presión sobre las glándulas cuando son expulsadas, facilitando la acumulación de líquido lubricante. A Nutrición apropiada favorece esta eliminación.
- También se sabe que algunas razas son propensas a problemas de glándulas. Si convivimos con un pastor alemán, un chihuahua o un caniche, por ejemplo, debemos prestar especial atención a este aspecto.
Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal no tenemos autoridad para prescribir tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te animamos a que lleves a tu mascota al veterinario si siente alguna molestia o malestar.
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