Mi perro es agresivo con otros perros: causas y remedios

La agresión canina dirigida hacia otros perros es un trastorno del comportamiento muy común en estos y otros animales y tiene su origen en:

• Genética: por un lado, la genética juega un papel muy importante, ya que en los perros se incorpora el concepto de agresión hacia congéneres ajenos a su propio grupo social.
• Mala socialización: por otro lado, la mala socialización y/o trato inadecuado por parte del dueño, especialmente en sus primeros meses de vida, es prácticamente la principal causa que explica por qué un perro se vuelve loco cuando ve a otros perros.
• La raza: Es importante subrayar que las características de cada raza canina también influyen en este tipo de agresividad, ya que no es lo mismo la agresividad heredada de un Rottweiler o un Pit Bull que la de un Yorkshire Terrier o un Chihuahua.

Sin embargo, mientras que algunas razas de perros son naturalmente más dominantes que otras, el verdadero problema radica en la formación que recibió el perro.

Una vez que el trastorno de conducta aparece y es correctamente diagnosticado, debe ser tratado conjuntamente con un profesional de la salud animalya que este tipo de perturbaciones pueden causar lesiones a otras personas, por lo que debe tratarse con responsabilidad.

Esta es una situación diferente a la anterior en muchos aspectos, ya que en este caso la agresión no se dirige hacia un ser humano similar fuera del grupo social del individuo en cuestión, sino que, por el contrario, se dirige a un miembro de su grupo. Este hecho cambia por completo la visión que se debe tener de la situación.

El concepto de se incorpora a la genética de un perro, especialmente si es macho y no está castrado. jerarquía social dentro de un grupo y la única forma en que los perros saben clasificarse jerárquicamente dentro de su propio grupo social o manada es a través de la agresión. Si bien este comportamiento heredado está más profundamente arraigado entre los perros machos, también existe la necesidad de una ubicación jerárquica dentro de su grupo social entre las perras, y esta ubicación también se logra a través de la agresión.

En los perros domésticos que viven en la misma casa, con los mismos amos con los que crean lazos afectivos, que deben compartir sus recursos críticos como agua, comida, lugares de descanso, etc., es muy probable que en algún momento busquen su posición social, con lo cual es muy probable que en algún momento esta posición intente resolverse por la agresión de uno de los perros hacia el otro. Así, si tu perro ataca a tu cachorro, tu cachorro ataca al otro perro o ambos son adultos y uno ataca al otro, es muy probable que lo hagan para establecer su posición jerárquica, sean machos o hembras.

Después de entender la base biológica del origen de la agresión entre perros que viven juntos o que no pertenecen al mismo grupo social, surge una pregunta: ¿cómo calmar a mi perro agresivo? Independientemente del tratamiento farmacológico y/o quirúrgico correspondiente indicado por el profesional de la salud animal según cada caso particular, siempre es necesario realizar una terapia de modificación de conducta, la participación activa del animal o animales es fundamental para el éxito de esta terapia cuidadores del animal y no debe dejar la solución del problema exclusivamente en manos de terceros.

Cuando se trata de agresiones entre perros, se deben identificar dos situaciones diferentes. La primera cuando el perro ya muestra agresividad hacia sus congéneres y la segunda cuando el animal es un cachorro y aún no ha comenzado a mostrar este comportamiento.

Agresión en perros adultos

Si el perro ya es adulto, nuestro mejor consejo es acudir a un etólogo, educador o adiestrador canino con experiencia para que puedan evaluar al animal y encontrar las mejores técnicas de modificación de conducta para su caso, eso sí, siempre con refuerzo positivo.

Para las sesiones de modificación del comportamiento, el propietario deberá participar, no solo los profesionales de la salud y el comportamiento animal.

agresión en cachorros

La segunda situación sería la ideal, ya que se basa en la educación del cachorro, evitando que muestre y establezca comportamientos agresivos hereditarios. Esto se consigue socializar al cachorro con otros perrosinhibiendo la conducta agresiva cuando comienza a manifestarse en las primeras ocasiones y con la ayuda del refuerzo positivo.

En definitiva, prestar atención a algo tan conocido como la genética y el medio ambiente. Se sabe que la genética de un individuo determina alrededor del 30% de su comportamiento, es decir, el entorno lo hará en un 70%. Esto significa que no importa qué carga genética de agresión lleve un perro, si su tutor lo cría adecuadamente, ese animal no exhibirá un comportamiento agresivo hacia sus congéneres durante su vida.

Además de los diversos remedios ya mencionados, como propietarios podríamos intentar distraer al perro con varios juegos, podríamos tirarle la pelota y por lo tanto, tratar de distraerlo o evitar situaciones en las que el perro pueda volverse agresivo (encuentros con otros animales o individuos).
Uno de los errores a evitar es tirar de la correa al perro si nos encontramos con otros perros: este comportamiento es completamente incorrecto y haría que nuestro peludo se sintiera aún más inquieto.
Siguiendo estos consejos, la situación debería mejorar. Sin embargo, a pesar de todo, una de las soluciones más efectivas y rápidas es consulte a un educador de perros.

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