Responsabilidad del cuidador de gatos: lo que establece la ley
En ocasiones, cuando no estamos en casa, nos vemos obligados a confiar el gato a un tercero: ¿en qué hipótesis surge la responsabilidad del cuidador de gatos?
Nuestros amigos de cuatro patas son miembros de nuestra familia en todos los aspectos; y hay situaciones en las que preferimos no dejarlos solos en casa, recurriendo a una figura profesional para su custodia durante nuestra ausencia. Al configurar el responsabilidad del cuidador de gatos? Esto es lo que dice la ley.
¿Qué es el cuidador de gatos?
La de cuidador de gatos es una profesión relativamente reciente, y surge de la necesidad de cuidar al gato durante la ausencia de sus dueños.
Puede ser una ausencia prolongada (piense por ejemplo en las vacaciones de verano, donde no siempre es posible o aconsejable llevar al gato), o diaria, durante las horas en que los familiares no están en casa (por razones de trabajo, estudio por ejemplo).
Entonces, ¿qué hace el cuidador de gatos? Básicamente, realiza cualquier actividad que sea necesaria durante la ausencia de los familiares: darle de comer, jugar con el gato o simplemente hacerle compañía.
En algunos casos, cuando el gato no es autónomo debido a una enfermedad, puede ser necesario realizar aquellas actividades que el felino normalmente hace solo, como cuidar el pelaje.
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Responsabilidad civil
Partimos de la premisa de que trabajamos desde cuidador de gatos no siempre se rige por un contrato regular (lo que sería preferible), que establece con precisión cuáles son las tareas encomendadas al profesional, como las horas de trabajo, como el salario.
Efectivamente, en el caso de incumplimiento o ejecución incorrecta de las tareas encomendadas (ya que se le exige que las realice con la diligencia del buen hombre de familia, o realizando las tareas que se le encomienden con la diligencia y competencia que se puede esperar de «hombre promedio «) uno emergería responsabilidad contractual.
los cuidador de gatos sería responsable de cualquier fuga o pérdida del gato que se produzca durante su jornada laboral, y es igualmente responsable de cualquier daño que el gato cause durante este tiempo (teniendo que responder de los gastos médicos por una lesión que el gato consiguió durante la fuga).
los cuidador de gatos también es responsable de cualquier daño que cause el gato hacia terceros, aunque es una hipótesis que se da menos que los que cuidan al perro, donde hay más «oportunidades»: piensa en la responsabilidad del cuidador debido la circunstancia de que el perro, durante el paseo, haya mordido a una persona oa otro perro.
Dicho esto, de conformidad conArte. 2052 cc, el propietario, o quien lo tenga bajo custodia (por lo tanto también cuidador de gatos) es responsable de los daños causados a terceros por el animal, (por tanto, gatos incluidos), salvo prueba por parte del caso fortuito, que es un hecho excepcional, y por tanto impredecible, que exime de responsabilidad extracontractual.
En caso de responsabilidad, el perjudicado también podrá dirigir sus quejas contra el propietario, que sin embargo es reconocido derecho de recurso en contra de cuidador de gatos.
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Antonio Scaramozza