Rinotraqueítis: la enfermedad viral que afecta a los gatitos

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La Rinotraqueítis es una enfermedad viral estacional que afecta al tracto respiratorio superior y es muy común en los gatos. Esta enfermedad es causada por dos tipos de virus, incluidos el herpesvirus y el calicivirus, que son muy contagiosos para los gatos pero no transmisibles a los humanos.

La transmisión entre gatos se produce a través de la saliva, secreciones producidas por los ojos y la nariz, pero también a través de las heces. Los gatitos que viven al aire libre, no vacunados, tienen más probabilidades de contraer esta enfermedad viral. Los sujetos de mayor riesgo son los gatos muy jóvenes, los gatitos no vacunados y los que viven al aire libre o pueden entrar en contacto con animales contaminados. Muy a menudo, los cachorros contraen el virus de su madre y se infectan antes de ser vacunados.

SÍNTOMAS Los síntomas son muy sencillos de identificar: estornudos, moqueo y congestión nasal, infección ocular y consecuente lagrimeo, tendencia a toser y anorexia, ya que el gato, perdiendo el sentido del olfato, tiende a no alimentarse y adelgaza.

Si no se trata, esta patología podría dar lugar a complicaciones que incluyen conjuntivitis aguda y crónica que también pueden llevar a la pérdida del ojo en caso de ulceración o intervenciones inoportunas. Algunos casos pueden complicarse con neumonía.

TERAPIA- El curso de la enfermedad es de unos diez días para los gatos adultos, mientras que para los gatitos es más prolongado y la infección puede llegar a ser letal. La terapia consiste en administrar antibióticos, suplementar con vitamina B y, en el peor de los casos, rehidratación. En cuanto al cuidado de los ojos, es bueno recordar que deben limpiarse con soluciones oftálmicas veterinarias pero también con manzanilla. La manzanilla debe hervirse y luego dejarse enfriar. Luego se puede aplicar al algodón con el que limpiar el ojo infectado del gato. También pueden ser útiles lavados nasales, antivirales, aerosoles, atropina y ungüentos para eliminar las costras y adelgazar los ojos y la nariz.

Para prevenir este tipo de virus, los gatos se vacunan desde la novena semana, cuando los efectos de los anticuerpos maternos comienzan a disminuir. Además, también se puede realizar un retiro anual, especialmente cuando el gato aún es joven, que lo protegerá de estos virus.