Por qué los perros cuelgan alrededor de sus cuellos: lo que necesita saber
¿Por qué los perros se cuelgan del cuello mientras juegan juntos? En realidad es una actitud común. Aquí descubrimos el significado de esta alarmante acción.
No hay nada más emocionante que ver a tus amigos de cuatro patas jugar y divertirse juntos todos los días. Sin embargo, a menudo puede ocurrir que notes actitudes extrañas y preocupantes, que te hagan pensar que de repente se están atacando entre sí. Pero, ¿es realmente así? Vemos ¿Por qué los perros se cuelgan del cuello? Y que hacer al respecto.
¿Por qué los perros cuelgan alrededor de sus cuellos?
Esta es una actitud que suelen adoptar los perros, especialmente cuando están jugando. Cuando sucede y parece que pierden el control, rápidamente te preocupas. Pero, ¿cuál es la razón que los impulsa a hacerlo? Profundicemos en el artículo.
Cuando tienes varios perros, siempre te preocupas de que se lleven bien con el tiempo. por Illinois Bienestar y la felicidad de toda la familia.
Es importante, de hecho, que dos (o más) amigos peludos se conozcan bien y que déjalos aprender gestionar sus propios espacios y afectos comunes, sin ningún tipo de celos u obstáculo territorial.
Una de las características caninas más alarmantes es la agresión y, en ocasiones, esta puede desencadenarse repentinamente de un perro a otro, en un contexto tranquilo y aparentemente desmotivado.
A todos les pasa ver, dentro o fuera de casa, en contacto estafa i su similar, confío en que mientras juega feliz comienza a agarrar al otro perro por el cuello. Un gesto que no se puede explicar inmediatamente.
Pero, ¿por qué los perros cuelgan del cuello? En realidad, este gesto tan agresivo a nuestros ojos humanos, para los amigos animales es algo absolutamente natural.
Entre el juego y el instinto depredador
Cuando dos o más perros juegan juntos, se activa entre ellos un mecanismo en el que se expresa toda su naturaleza y, por tanto, también el instinto depredador es parte de su ser animales.
Mientras los peludos se olfatean y dan vueltas unos alrededor de otros, tocándose y corriendo, es normal que intenten agarrarse al cuello con abrazaderasatrapado en la emoción de la situación.
Hablemos de una forma de tocar que, eso sí, sigue teniendo un límite ese no Virginia sobrepasado, para evitar consecuencias desagradables o accidentes. Aquí es donde radica el problema, porque a menudo es difícil saber si se está exagerando o no.
Agarrar por el cuello y gruñir, tener dominio unos sobre otros, son pasajes que forman parte de su naturaleza que tiende a ser agresiva, por un hecho de predominio mi territorialidad.
No olvidemos que, para nuestros amigos perros, usar desde el boca mi del Morsi indispensable en el conocimiento y, sobre todo, en el comunicación con el otro animal.
Comunicación a través de i sensible es lo que permite a los peludos sobrevivir y conocer el mundo y a quienes los rodean. Esto, sin embargo, debe tener lugar siempre bajo nuestra observación.
Usted también podría estar interesado en: Por qué los perros ladran todos juntos: lo que es importante saber
Pelosi se agarra: cómo intervenir
Cuando dos ejemplares comienzan a enfrentarse y comunicarse entre sí, siempre se debe tener cuidado de que el juego no se convierta en una pesadilla para todos y que no salgan lastimados. Sigamos leyendo aquí.
Como decíamos más arriba, para los animales es fundamental Acercarse lun el otro y acercarse de forma física, entre vocalizaciones, mordiscos, olfateo y algunos empujones.
se trata de querer para explorar su propia especie y, para hacerlo correctamente, es natural que las personas peludas usen esos herramientas que tienen a su disposición, no teniendo el don de la palabra.
Tal como lo hace fido con su amo, creando un contacto a veces molesto pero físico. necesariohace lo mismo con otro perro que entra en su línea de visión, presente en la casa o afuera en la calle.
Obviamente, cuando sea testigo de este comportamiento en particular, es recomendable estar atento y para prevenir agresiones accidentes de los que pueden no ser conscientes.
Cuando percibimos que el juego va demasiado lejos y que uno o ambos empiezan a ponerse demasiado violentos, inmediatamente intervenimos empujándolos y exclamando: dominio “¡No!“.
De esta manera, puedes calma la situación y restaurar la paz mental entre los dos. Tan normal como es para nosotros aceptar el instinto depredador en los perros, es bueno educar cada vez para detenerse en el tiempo, para que el abucheo entienda que hay límites.