¿Perros groseros? Esta es una regla simple (primera parte)

Educar a un cachorro es un poco como educar a un niño pequeño y debe hacerse en cada momento de su crecimiento. Hay tantos perros que se quedan solos en casa que causan problemas y destrozan toda la casa. Nuestro cachorro exhibirá naturalmente algunos comportamientos que son bienvenidos y otros menos bienvenidos para nosotros. El SECRETO de una educación correcta es nunca darse por vencido, no mostrar inconsistencia al dar una orden y tener cuidado de no recompensar los comportamientos incorrectos con mimos y comida. En esta hoja hablaremos del perro que salta sobre el dueño para las vacaciones.

Aquí está el enlace de la segunda parte: el perro tirando de una correa

SI EL PERRO YA ES ADULTO, CÓMO COMPORTARNOS:

Si el perro ya es adulto y ya ha desarrollado comportamientos inapropiados, tendremos que volver a la base del problema y comprender qué recompensa le hizo cometer errores. Más perros «groseros» han recibido mensajes confusos y contradictorios de sus amos y de alguna manera se han “educado”, con el resultado de que los jefes no tienen el control.

La reeducación de un perro adulto ciertamente es mas dificil de la educación de un cachorro porque será necesario cancelar todas las experiencias anteriores y empezar de nuevo. Será necesaria la intervención de un educador o adiestrador canino. El registro ENCI EDUCATORS mi EL REGISTRO DE EDUCADORES DE SIUA incluye una amplia selección de educadores de nivel básico y avanzado que podrán resolver mejor sus problemas.

Pero si el perro en cuestión muestra signos de agresión o comportamiento anormal, es mejor acudir a COMPORTAMIENTO VETERINARIO quién sabrá cómo solucionarlo.

SI EL PERRO ES UN CACHORRO:

Una de las primeras malas actitudes de un perro es saltar sobre al maestro para celebrar cuando llegue a casa. ¿Por qué no deja de hacerlo incluso si lo regañan? El salto en el Maestro, tanto como regañarlo, no son más que un recordar de atención continua por parte de nuestro perro, que consigue lo que quiere sin el menor esfuerzo, de hecho solo provocando molestias. La única forma de evitar que el perro se vuelva loco entre saltos, ladridos y jadeos es entrar, permanecer en silencio, evitar mirarlo y prestarle atención, posiblemente evitar agitar los brazos porque podría emocionarse y esperar hasta que el perro lo haga. Estate calmado. Junto a este reproche si se lo saltaba, sin embargo, debemos agradecerle y abrazarlo si se sienta a esperar nuestras caricias de una manera tranquila y asertiva.
Este es un ejemplo típico de cómo educar a un perro, enseñándole lo que le gusta y no solo tratando de reprimir lo que no es bienvenido. Es evidente que para llegar a la conclusión del comando, tendremos que entender que la recompensa de saltar sobre él será nuestra atencióny por lo tanto para evitar que salte obviamente tendremos que no prestarle atención.

Otra técnica eficaz para perros grandes que saltan es levantar la rodilla (con un perro grande) o el pie (con un perro pequeño) cuando el perro se apoyará en nuestras piernas. Al hacerlo, el perro perderá estabilidad y se sentirá alejado de nosotros y aunque repita la acción no tendremos que rendirnos por el contrario podremos dar la vuelta hasta que, como se mencionó anteriormente, se calmará y esperará nuestras caricias sentado.