Perros en ‘modo turbo’: esta es la razón de estos comportamientos
El comportamiento de los perros es objeto de los estudios más dispares y muy a menudo nos encontramos con el error de dar lecturas erróneas. De hecho, sus otras señales son más sutiles y fácilmente malinterpretadas. Por ejemplo, ¿quién de nosotros no está convencido de que al perro le gusten los abrazos? La historia de Sorasart Wisetsin, un joven tailandés que ha sido rebautizado como «el hombre que abraza a los perros callejeros». En realidad, cuando abrazamos a nuestro perro le provocamos un gran estrés y ansiedad. El doctor escribe sobre «Psychology Today» Stanley Coren.
También hay varios comportamientos que no deben subestimarse. En un artículo de hace unas semanas, indicamos nueve, pero ahora necesitamos sugerir un décimo: el perro corriendo salvajemente. Esto también sucede cuando el animal no está en un espacio abierto y por eso muchas veces nos preguntamos por qué lo hace. Según una explicación científica, no hay nada de anómalo en lo que se llama ‘modo Turbo’.
¿Qué es Frap?
Los veterinarios lo llaman ‘Momentos de actividad frenética aleatoria’, traducido del inglés ‘Periodos de actividad aleatoria frenética’ (Frap). Según la ciencia, es una necesidad natural real para los perros. Estos, de hecho, a menudo tienen la necesidad, bastante natural, de descargar el exceso de energía acumulada por el cuerpo. Por esta razón, el primer consejo no es reprimir el Frap, sino asegurarse de que se produzca en condiciones seguras.
En definitiva, mejores espacios abiertos que los ambientes domésticos o en todo caso llenos de obstáculos. En resumen, los entornos ideales son parques, villas y áreas para perros. Otro consejo útil es que tu perro se acostumbre a descargar el Frap corriendo junto a nosotros. Esto no siempre es posible, pero hay una forma de saber cuándo el animal está a punto de empezar a correr. De hecho, es común ver a algunos perros meneando la cola de manera llamativa, mientras que otros están atrapados en sus patas traseras.
Ante situaciones peligrosas u obstáculos, puedes intentar frenar al Frap de una forma bastante sencilla y sin daños colaterales. Simplemente dale una ligera presión sobre sus hombros o dale palmaditas detrás de las orejas. De esta forma, según los veterinarios, el perro tiende a calmarse. El fenómeno ciertamente está mucho más desarrollado entre los perros más jóvenes, mientras que disminuye con los años. Luego hay razas en las que este fenómeno es más frecuente. Piense en galgos y ‘terriers’, incluidos perros Jack Russell, Pitbull y Yorkshire.
GM