Los perros intentan entender nuestras palabras
Muy a menudo tenemos la sensación de que nuestro perro comprende lo que le decimos. Y entonces nos da ternura verlo moverse e inclinar la cabeza hacia la derecha o hacia la izquierda con las orejas rectas en señal de atención, pensando en ese momento que está tratando de interpretar nuestras palabras. El lenguaje está formado por sonidos y gestos y es la base de la comunicación.
Siempre nos han enseñado comúnmente que los perros son incapaces de entender nuestras palabras y que asocian los sonidos con una orden o un gesto y movimiento de nuestro cuerpo. A pesar de la diversidad del lenguaje, algunos investigadores han intentado analizar facultades cognitivas presente en el perro cuando interactúa con humanos.
Es decir, un estudio reciente realizado por investigadores de la Universidad de Sussex y publicado en Biología actual Analizó las actividades cerebrales del perro que intenta procesar el lenguaje humano mediante el cual se activan los dos hemisferios de su cerebro.
La investigación se realizó en 250 perros, basándose en el hecho de que hemisferio izquierdo se activa para analizar i contenido fonémico más miembros de la familia, mientras que derecho está activo en el tono Está en retorno de la comunicación.
Es decir, se trata de dos piezas de información que permiten a nuestro perro entender lo que le estamos diciendo. Algunos estudios anteriores habían demostrado que el perro gira la cabeza hacia la izquierda cuando usa el hemisferio derecho y viceversa inclina la cabeza hacia la derecha cuando usa el izquierdo.
Por tanto, los investigadores sometieron a los perros a dos tipos de pruebas:
– En la primera prueba tocaron frases emitidas por un sintetizador de voz de modo que no había tono de voz que transmitiera emociones. En este caso, los perros tienen hemisferio izquierdo activado, por lo que centraron su atención en las palabras.
– En la segunda prueba, la misma frase fue pronunciada por un humano, con una inflexión lingüística diferente a la habitual. En este caso, en los sujetos analizados se la parte derecha activada. Es decir, el perro se centró en el sonido.
Conclusión: Los investigadores concluyeron que el perro reacciona a las palabras como los humanos. Incluso si no puede entender cada palabra, ¡el perro intenta interpretar lo que le decimos!