Las enfermedades más comunes en las chinchillas: de la piel a los dientes

Las enfermedades más comunes en la chinchilla, todas las enfermedades que afectan a este roedor y cómo reconocer el estado de salud del animal.

chinchilla en el veterinario

(Foto de Adobe Stock)

La chinchilla ahora es considerada por muchos como una mascota. Y precisamente por eso en muchos hogares los queridos perros y gatos han sido sustituidos por estos pequeños roedores.

Muy a menudo la elección recae en ellos por una cuestión de espacio, otras veces por menos esfuerzo. De hecho, la chinchilla, que vive mayoritariamente en una jaula, no quita el mismo tiempo que un perro que necesita pasear.

Pero dicho esto, lo que no cambia para ningún animal que planeas adoptar es la atención médica.

De hecho cualquier animal tiene sus debilidades y sus enfermedades, por lo que es fundamental saber reconocer los síntomas y cómo proceder para tratar al animal.

De hecho, en este artículo vamos a conocer cuáles son las enfermedades más comunes en la chinchilla.

Enfermedades más comunes en la chinchilla

enfermedades comunes en la chinchilla
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Las enfermedades más comunes en las chinchillas pueden ser las siguientes:

  • diarrea: la diarrea es el problema intestinal más común en las chinchillas. Lo que más provoca la diarrea en las chinchillas son los cambios bruscos de temperatura, el cambio de dieta, la administración de demasiada fruta o verdura, piensos inadecuados y parásitos. Durante la primera fase se presenta con heces blandas, mientras que si se descuida se presenta con heces totalmente líquidas, lo que puede hacer que la chinchilla se deshidrate con bastante rapidez. Lo primero que debe hacer en esta situación es contactar a su veterinario de confianza y cambiar la dieta de la chinchilla al mismo tiempo. Eliminando los gránulos durante unos días y dejando el heno y una cucharadita de vinagre de Apple en la botella con el agua. El vinagre de sidra de Apple es un excelente desinfectante natural y equilibra la flora bacteriana intestinal;
  • esterilidad: la esterilidad en las chinchillas puede ser permanente y temporal. Los casos de esterilidad definitiva son los más raros y afectan tanto a ejemplares masculinos como femeninos. La infertilidad temporal, por otro lado, es frecuente en las mujeres y puede ser causada por diferentes factores: salud general, cambio general de ambiente y dieta, infección uterina, incompatibilidad de carácter;
  • prolapso de la vagina: esta es una condición que ocurre en la mayoría de los casos después de partos difíciles, en los que la hembra ha tenido que hacer un esfuerzo especial para sacar a las crías. En este caso es necesario llevar la chinchilla al veterinario con urgencia. A diferencia del prolapso del recto, el prolapso de la vagina se puede reducir, al menos en la mayoría de los casos.
  • parafimosis del macho: Es una condición que ocurre en la mayoría de los casos inmediatamente después del apareamiento, cuando se forma un anillo de pelo alrededor del pene, lo que impide que este último vuelva normalmente debajo del pelaje. Es necesaria la intervención del veterinario que tiene que sacar el pene del pelaje y retirar suavemente el anillo de pelo. Si la intervención no es oportuna, puede convertirse en un absceso o incluso causar necrosis del órgano;
  • alopecia: consiste en la caída del cabello de la chinchilla que podemos encontrar en una o varias partes del cuerpo del animal. en esta ocasión el cabello cae en parches dejando intacta la piel subyacente (a diferencia de la micosis);
  • micosis: son bastante frecuentes, incluso si son benignos. Las micosis son causadas por hongos (hongos) y son contagiosas tanto para los humanos como para otros animales. Al igual que las alopecias, generan la caída del cabello alrededor del hocico, alrededor de los ojos, detrás de las orejas, en la punta de las patas delanteras y alrededor de los genitales. La única diferencia es que la piel tiene un color rojizo y parece «escamosa». La intervención del veterinario es necesariamente necesaria porque si no se tratan, las lesiones tienden a invadir todo el cuerpo;
  • Mascar skins: la principal causa se atribuye al estrés provocado por ruidos continuos, fatiga, cambio brusco de hábitos, humedad o mala higiene de la chinchilla. La chinchilla afectada por Fur-Chewing roe una parte de su pelaje, arruinando su apariencia y dejándolo con mechones de pelo cortos (pero no ausentes) y más oscuros;
  • rotura accidental de un diente: es necesario consultar a su veterinario, quien evaluará el estado de crecimiento del diente roto, y si es necesario lo limará para igualarlos. La rotura del diente en la chinchilla puede ocurrir accidentalmente, en una pelea con uno similar, enganchándose a los barrotes de la jaula, luego de una caída, o de otras formas;
  • maloclusión dental: se trata de una enfermedad muchas veces hereditaria y difícil de curar con éxito, por lo que conviene mantener bien controlada la dentadura de la chinchilla llevándola al veterinario, quien con un instrumento especial controlará los molares que no son visibles a simple vista. La maloclusión dental en las chinchillas se produce cuando los molares, al no poder consumirse adecuadamente, provocan heridas en el interior de la boca y aprisionan la lengua, impidiendo que la chinchilla trague. Los signos que se pueden encontrar en el animal son: fuerte salivación, ojos llorosos, letargo y ya no puede comer, por lo que pierde un peso drástico;
  • resfriados: la continua bajada de temperatura, la exposición a corrientes de aire o al contagio de otros animales y en ocasiones incluso del hombre, pueden traer resfriados en la chinchilla. Los signos más evidentes son: ronquera, estornudos, ojos llorosos y apatía;
  • neumonía: es una enfermedad de origen microbiano mucho más grave. Las causas de la neumonía son muchas: generalmente la exposición a las corrientes, pero también el estrés por cambios en el medio o la dieta, o por supuesto el contagio. Los síntomas son los mismos que los de la bronquitis y los resfriados con el agregado de una respiración ruidosa y acelerada, a la que a menudo se agrega un estreñimiento fuerte;
  • estreñimiento: El estreñimiento es una condición de enlentecimiento del tránsito intestinal, que no permite que la chinchilla digiera bien y por lo tanto defeque con normalidad. No debe subestimarse en absoluto porque, si no se trata, podría provocar un bloqueo intestinal. De hecho, los expertos recomiendan alimentar a veces con verduras o frutas, que varían el estilo de alimentación demasiado seco de la chinchilla;
  • bloqueo intestinal: La causa de las obstrucciones intestinales suele ser el tipo de alimento demasiado seco o incluso la ingestión de materiales «extraños» como yeso, skins, trozos de madera, plástico, tela, etc. hay que tener mucho cuidado porque si la intervención no es inmediata hay altas posibilidades de que la chinchilla no sobreviva. Evidentemente, la ausencia de heces ayuda a determinar el problema, junto con el letargo y la inapetencia. La intervención del veterinario debe realizarse con rapidez y es fundamental.

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Cómo saber si la chinchilla está enferma

La chinchilla, como todos los animales, si se mantiene en excelentes condiciones, la comida, la temperatura (incluida la humedad y las corrientes de aire) y el estrés, es un animal que apenas se enferma.

Desafortunadamente, sin embargo, difícilmente significa nunca, por eso es importante aprender a reconocer las enfermedades más comunes en la chinchilla, ya que una intervención rápida puede ser vital.

Por este motivo, los expertos sugieren hacer un chequeo diario del cuerpo del animal, justo cuando lo levantamos para acariciarlo.

Otro factor que puede hacernos comprender la salud de la chinchilla, son sus heces las que generalmente deben ser un poco ovaladas, de color marrón, bastante secas (no deben estar pegadas a los distintos accesorios) y además son inodoras.

La parte externa debe ser lisa y regular, mientras que la consistencia interna debe ser perfectamente homogénea.

Deben ser compactos pero no duros y bastante abundantes (especialmente al atardecer). Finalmente, otra cosa que puede hacernos comprender las condiciones de la chinchilla es el comportamiento.

Una chinchilla sana tiene un comportamiento vivaz y curioso, mientras que cuando está enferma se acurruca en un rincón de su jaula, muchas veces con los ojos medio cerrados, deja de beber y comer, se mueve con dificultad y lo menos posible. En otras palabras, entra en un estado de apatía total.

Raffaella Lauretta