La liebre: características, hábitat, reproducción y nutrición
La liebre, un animal mamífero tímido y nocturno, que no debe confundirse con el conejo salvaje. Veamos juntos las características, hábitat y nutrición.
Liebre es el nombre común, pertenece al orden de los lagomorfos y a la familia de los leporinos. La liebre se diferencia del conejo salvaje por tener patas y orejas más largas y en ellas las puntas de color negro.
Es un animal que podría compararse con un deportista real que puede correr a 64 km / hy saltar hasta 3 metros. En este artículo, además de las curiosidades sobre este animal, también aprenderemos sobre las características, hábitat y dieta de la liebre.
Características de la liebre
La liebre es un mamífero lagomórfico perteneciente al género Lepus y la familia Leporidae, el mismo en el que se clasifica el conejo. Hay alrededor de 50 especies de liebres en la familia de los lepóridos. En este caso nos ocuparemos de la liebre común.
Mide de 50 a 70 centímetros, a lo que hay que sumarle unos 8 centímetros de cola, mientras que la altura a la cruz es de 30 centímetros y el peso oscila entre los 3 y los 6 kilos. Tiene orejas de unos 15 centímetros de largo, cuyos pelos son negros en la punta.
Largas patas traseras que utiliza para saltar en busca de alimento o para huir de sus depredadores, con hábiles sprints. El pelaje de la liebre también está diseñado para mezclarse no como un armiño, pero sigue siendo útil y por lo tanto le da la oportunidad de pasar desapercibido para sus depredadores.
Otro rasgo es su perfecta inmovilidad cuando percibe un peligro. Con esta estratagema trata de integrarse lo más posible en el entorno que lo rodea. Otra arma a su disposición es excelente audición, que le permite percibir los más leves ruidos.
El sentido del olfato también es excelente, lo cual es de gran utilidad no solo para sentir presencias adversas, sino también para conseguir alimento. La vista también es buena, especialmente el campo de visión, que es decididamente amplio gracias a la posición lateral de los ojos. En esta especie animal, las hembras son más grandes y pesadas que los machos.
También tienden a diferir porque los primeros echaron las orejas hacia atrás; mientras que los machos los mantienen derechos. El comportamiento de la liebre tiende a ser solitario, muy apegado a su territorio. También por este motivo, la densidad de animales no puede ser excesiva.
Durante el día permanece escondido en una pequeña depresión que se hunde en el suelo al descubierto entre la hierba alta, a lo largo de un terraplén o debajo de un arbusto; en invierno a veces puede refugiarse bajo la nieve. Mientras que al atardecer y toda la noche está en pleno apogeo.
Hábitat y reproducción
La liebre se encuentra en varios países de África, Asia, Europa y América del Norte, además de Australia. donde fue introducido recientemente por el hombre. El hábitat natural de la liebre consiste en tierras descubiertas más o menos cultivadas (prados, pastos, pastizales, viñedos, campos de cereales) intercalados con setos o matorrales pero también zonas áridas, en el que construye madrigueras en el momento del nacimiento de las crías.
Estos pueden tener aproximadamente 1 metro hasta 3 metros de profundidad dependiendo de la especie. Y decir tane no se equivoca, pues en su territorio suele tener más de un refugio, al que llega siguiendo caminos siempre distintos. Después del nacimiento de sus crías, la liebre abandona esa guarida específica.
La liebre alcanza su madurez sexual aproximadamente al año de vida y espera la época de apareamiento para poder reproducirse. este período es bastante largo y va desde febrero hasta finales de julio. Todo comienza con un cortejo, que da lugar a una abundante secreción de sustancias olorosas que, depositadas en el suelo, favorecen el encuentro entre machos y hembras.
Un órgano especial colocado dentro de las mejillas produce un «olor» que ambos socios rocían sobre el cuerpo para atraerse. La hembra mueve frenéticamente su cola blanca y negra esparciendo más «perfume».
Estos dos factores, el color y el olor, empujan al macho a perseguir a la hembra. La gestación dura alrededor de 43 días y suelen dar a luz de 2 a 4 veces al año. en los meses de febrero-abril y junio-julio.
A diferencia del conejo, las crías nacen con los ojos abiertos y ya están equipadas con pelaje, pesan aproximadamente 70-150 gramos al nacer. Puedo moverme de forma independiente después de unos días de nacimiento.
El desarrollo es realmente muy rápido y ya a la semana del nacimiento el peso de la cría se duplica y al destete, que se produce alrededor de los 20/21 días de edad, el peso puede llegar a los 600-700 gramos y desde ese momento se alejan de la madre. La esperanza de vida de una liebre en estado salvaje varía entre 7 y 9 años, pero si está en cautiverio y con los cuidados necesarios, este período se puede extender a 12 años de vida.
Alimentando a la liebre
La dieta de la liebre es bastante similar a la de los conejos y tiende a ser fácil de encontrar, ya que se encuentra en abundancia en su hábitat natural. La liebre es vegetariana, por lo que su dieta se basa exclusivamente en hierbas y plantas, tales como: arbustos, cereales, bayas y frutas.
En invierno se satisface con corteza, brotes, aulagas y semillas de plantas herbáceas. Realiza la atrofia ciega, cual es uno en particular Característica fisiológica de la digestión de la liebre que consiste en producir dos tipos de estiércol: las heces reales (heces duras) y el cecotrofo (heces blandas) rico en vitamina B.
El cecotrofo ha significado un verdadero alimento y es fundamental para la supervivencia del animal que lo vuelve a tragar aspirándolo directamente del ano.
Usted también podría estar interesado en:
Raffaella Lauretta