Enséñele a su perro a quedarse solo en casa. ¿Cuáles son los consejos?
Uno de los momentos catárticos en la vida de un perro es afrontar separación del jefey en el momento en que sale de casa y se queda solo. Todos sabemos muy bien que cualquier cachorro sufre de soledad tanto por parte del dueño como en la manada, por lo que será un momento estresante para él. Los primeros signos de stress las podemos encontrar en el perro que ladra, que babea continuamente, que destroza todo lo que encuentra a su alrededor, llora y realiza comportamientos estereotipados como rascar puertas, ventanas y jadear. Esto significa que sufre de ansiedad por separación. Los cachorros nacidos o criados en un entorno inseguro o peligroso son hijos de madres asustadas y tristes que no han enseñado a sus hijos a ser perros equilibrados. Los perros y cachorros necesitan atención, pero también tienen reglas estrictas para sobrellevar bien la soledad en general.
Lo primero que debes hacer, cuando se presente la oportunidad de salir sin poder cargarlo, será NO RITUALICE EL TIEMPO DE SALIDA, es decir, no des señales claras y repetidas cada vez que dejas solo al cachorro (busca las llaves, ponte el abrigo, abraza al animal valiente). No debemos mostrarle al perro las etapas iniciales de nuestra ausencia, pero tendremos que mostrar calma, casi un efecto, sin saludos, sin abrazos, limitar el uso de palabras (hola, nos vemos luego, salgo, salimos) porque cada vez que vuelvas a fallar el perro asociará esas palabras con tu salida y se irá ansioso. mucho más temprano.
La segunda cosa a hacer será yvitare, por ejemplo, para completar el cuenco de perro antes de irnos como si estuviéramos desaparecidos por un mes. A menos que sea la hora de comer o el perro sea un cachorro y tenga que comer varias veces al día, esperamos darle de comer cuando regresemos, pero no inmediatamente después de nuestra llegada, sino unas horas más tarde. El perro no tendrá que asociar nuestro regreso a la comida, porque también estará ansioso por eso y esperará comer cada vez que regresemos.
La tercera cosa a hacer será, lejos ir al perro media hora antes de salir y volver a hacer nuestros quehaceres de forma natural y luego después de salir sin el perro pensando que cada vez que salgamos a sacarlo será porque tendremos que salir y dejarlo solo. Así que prepara tu chaqueta, llaves y cosas mucho antes de irte para que él no se dé cuenta.
El momento del regreso es igualmente estresante para el perro. los Las fiestas que el perro nos hará no serán retribuidas de ninguna forma, Aunque nos parezca extraño, el perro sabe que saltar, ladrar e hiperventilar captarán nuestra atención y solo lo pondrán más ansioso. Cuando regresamos, ignoramos al perro hasta que vemos que se calma, que se calma y luego nos acercamos a él y lo abrazamos.
Para que se vayan acostumbrando paulatinamente a estar solos, el tiempo de ausencia del maestro debe ir alargándose paulatinamente, hasta alcanzar el intervalo normal.