Enfermedades más comunes del blanco y naranja francés: las patologías más frecuentes
Perro de caza muy activo pero ¿puede sufrir patologías? Todas las enfermedades más comunes del perro francés blanco y naranja.
Es normal que un amo se preocupe por la salud de su perro y sería mejor saber primero cuáles son las patologías que le pueden afectar, mucho antes de que aparezcan los síntomas. De hecho, para los amantes de la caza y los amigos de cuatro patas apasionados por esta actividad, es útil saber las enfermedades más comunes del francés blanco y naranja. Todo sobre la salud y vida media de este ejemplar.
Francés blanco y naranja: salud y vida promedio.
Es imposible imaginar a un perro dinámico especializado en la caza como un perro enfermo, de hecho no se puede decir en absoluto que lo sea. Los dueños de esta raza pueden respirar aliviados: de hecho, este espécimen goza de excelente salud (con las debidas precauciones, por supuesto).
En cuanto a la duración de su vida media, esta última fluctúa de 10 a 12 años. En definitiva, parece que el hecho de haber sido ‘creado’ en tiempos relativamente recientes ha traído excelentes resultados en términos de salud.
Enfermedades más comunes del francés blanco y naranja: qué son
Todos podemos respirar aliviados: parece que este perro realmente tiene una salud de hierro. Los continuos y recientes cruces, al parecer, han devuelto un perro perfectamente sano e inmune a enfermedades genéticas en la mayoría de los casos.
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Naturalmente esto no quiere decir que el Frenchie blanco y naranja no pueda padecer dolencias y enfermedades que pueden afectar a cualquier perro: una de las molestias a las que prestar especial atención será precisamente la zona de las orejas.
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Al ser un perro que sale mucho a cazar, ya que esta es su especialidad y al tener las orejas largas, que pueden albergar fácilmente gérmenes y bacterias, siempre lo revisamos cada vez que llega a casa. De hecho, para ejemplares como él a los que no les importa ‘bucear’ entre zarzas, barro y hojas para atrapar a sus presas, el riesgo de que la suciedad y los pequeños insectos aniden en el interior de las orejas es muy elevado. Estas infecciones, si no se curan y tratan con la higiene adecuada, pueden dar lugar a infecciones graves hasta el riesgo de sordera.
