El perro no quiere entrar en el transportín: causas y remedios
La caseta demuestra ser un aliado válido para el transporte del perro: ¿qué hacer si Fido no quiere entrar? Averigüémoslo juntos.
Al igual que para los gatos, el transportín puede ser útil para llevar a nuestro amigo de cuatro patas a donde lo necesite. Desde un viaje en tren hasta el itinerario para llegar al veterinario, esta herramienta es un aliado válido para un transporte seguro y cómodo. Sin embargo, no todos los peludos se inclinan a entrar: qué hacer si el perro no quiere entrar en el transportin? Aquí está la respuesta.
¿Por qué Fido no quiere subirse al portaaviones?
Antes de averiguar cuáles son los métodos de intervención más adecuados para solucionar el problema, es necesario comprender las causas subyacentes de la negativa de Fido.
Es muy probable que a primera vista el peludo amigo no lo considere un refugio, sino una auténtica prisión.
Especialmente en el caso de perros provenientes de situaciones de maltrato o perreras, de hecho, puede ocurrir que el cuadrúpedo perciba la estructura como un especie de jaula en la que será encerrado.
Para ello, es fundamental salir preparado y hacerle entender a Fido que este no es un lugar de encierro, sino un lugar cómodo en el que encontrar cobijo. Para hacer esto, sin embargo, requerirá un camino progresivo en el tiempo y mucha paciencia.
También te puede interesar: Claustrofobia en perros: cuando tu perro tiene miedo a los lugares cerrados
El perro no quiere entrar en el transportín: qué hacer
El primer método de intervención que debemos poner en práctica si el perro no quiere entrar en el transportín, por tanto, es cambiar su percepción de este soporte.
Para ello, podremos enriquecer su interior con una serie de complementos útiles para estimular la curiosidad, la relajación y el entusiasmo del peludo.
¿Algunos ejemplos? Un cómodo cojín para cubrir la superficie, juguetes y, por qué no, incluso algunos snacks.
Lo ideal, de hecho, sería atraer a Fido al interior, sin obligarlo a entrar. ¡¿Qué mejor estrategia que colocar el comedero del perro con su comida favorita dentro del transportín?!
También te puede interesar: El perro le tiene miedo al veterinario: así puedes ayudarlo
Durante los primeros acercamientos con la jaula, es fundamental que la puerta permanezca siempre abierta, para que el animal entienda que puede salir de la estructura cuando lo desee.
En caso de que el animal resulte particularmente asustadotambién podremos evaluar la posibilidad de retirar la parte superior del transportador de mascotas, para darle un aspecto más libre y aireado.
Una vez dentro, podremos convencer a Fido de que se quede allí ofreciéndole una serie de juegos y pasatiempos que le ayuden a aliviar el estrés y convencerle de una vez por todas de que el transportín no es una amenaza.
De esta forma, mediante el refuerzo positivo y una actitud alentadora, conseguiremos que el perro supere el miedo al transportista.