El perro comió demasiado en Navidad: que hacer y como solucionarlo

Codicioso y, a veces, un poco codicioso: qué hacer si el perro ha comido demasiado en Navidad. Todos los trucos para ponerlo en forma.

El perro comió demasiado en Navidad
(Foto de Adobe Stock)

Intentamos resistir, pero a veces también cedimos ante sus dos ojos compasivos pidiéndonos algo de nuestra comida. Además de todos los alimentos altamente no recomendados o prohibidos para Fido, ¿qué hacer si el perro comió demasiado en Navidad? Esto es lo que debe hacer después de las vacaciones de Navidad y cómo poner en forma a nuestro amigo de cuatro patas para evitar riesgos para su salud.

Perro en Navidad: los riesgos en la mesa

Seamos realistas: ¡los perros no solo se arriesgan a comer mucho en Navidad! Nosotros también somos a veces un mal ejemplo para ellos, pues pasamos horas y horas engullendo alimentos típicos y sobre todo en cantidades considerables.

Confía en mí en navidad
(Foto Pixabay)

Pero si Fido suplicaba nuestra comida y además seguía comiendo regularmente su ración de papilla, ¿no crees que ha exagerado un poco? Sin embargo, los peligros de la mesa navideña son tantos para nuestro amigo de cuatro patas, tanto que es imprescindible evitar que pruebe:

  • noches
  • salchichas
  • uvas y pasas,
  • chocolate y dulces varios.

Además de mantener alejados al perro y la nochebuena, hay que prestar atención (como de costumbre) a todo lo que se lleva a la boca. Al ser un animal muy curioso y goloso, es recomendable tener siempre los ojos abiertos. La responsabilidad, por tanto, de no ceder a sus miradas suplicantes durante las numerosas y frecuentes ocasiones de ‘comer’ es toda nuestra, ya que Fido nunca diría que no a un manjar.

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El perro comió demasiado: el riesgo de indigestión

Si un digestivo o un trote nos basta, no es lo mismo para el perro: el cuerpo de nuestro amigo de cuatro patas reacciona de forma completamente diferente al nuestro y naturalmente entra en problemas de indigestión. Este último muestra algunos signos alarmantes, como:

Fido desenvuelve los regalos de Navidad
(Foto Pixabay)
  • episodios de náuseas,
  • dolores de estomago,
  • mareo,
  • diarrea,
  • estado general de agotamiento.

¿Cómo remediar si el perro ha comido demasiado durante las vacaciones de Navidad? Al imponerle un ayuno forzado, aunque quizás la sensación general de «saciedad» todavía lo distraería de la idea de comer más.

Tenga cuidado de no dejar nunca que le falte agua, para evitar el riesgo de deshidratación en el perro. Para animarlo a beber pero también para calmar los posibles dolores de estómago por indigestión, podemos darle un poco de manzanilla que no esté caliente, quizás con el agregado de canela y cúrcuma.

El perro ha comido demasiado: como prevenir y remediar

Puede parecer obvio, pero en realidad la mejor manera de no hacer que Fido coma en exceso en ocasiones como Navidad es no ceder a sus peticiones. Tratemos de no estirar nada debajo de la mesa: de esta forma no solo evitaremos el riesgo de indigestión sino también de obesidad en el perro.

El perro comió demasiado en Navidad
(Foto de Adobe Stock)

Entonces, evitando hacer ‘excepciones’ a una dieta sana y equilibrada, ¿qué más podemos hacer por él? Llévelo a trotar o dar largos paseos, para que no se ponga pesado en la casa, quieto y relajado. Es mejor salir media hora, antes de las comidas, para reactivar músculos y cerebro.

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Si Fido come demasiado y rápido

¿Y si el hecho de comer mucho no solo queda relegado a la época navideña sino bastante frecuente? El riesgo de torsión gástrica es bastante alto, así que asegúrese de racionar la comida en porciones más pequeñas varias veces al día. También hay cuencos especiales en el mercado, que obligan al perro a una complicada ‘toma’ de comida. De esta forma Fido se acostumbrará a comer tranquilo y despacio, sin arrojarse sobre la comida como presa de un hambre atávica.

Francesca Ciardiello