Dermatitis nerviosa en el felino doméstico
Hay varios factores que provocan en nuestros tiernos felinos domésticos dermatitis como alergia a las pulgas. Entre las causas, sin embargo, también puede haber estrés por eso sucede que vemos a nuestros gatos acicalarse obsesivamente. Es un sistema por el cual el gato tiende a calmarse y lo hace deteniéndose a menudo en algunos puntos particulares de su pelaje, lamiendo y mordiendo continuamente.
En estas zonas se crea una dermatitis que puede provocar una especie de círculo vicioso ya que posteriormente el animal empezará a rascarse porque sentirá picor y viceversa le picará porque tenderá a rascarse en ese punto con mayor frecuencia debido al estrés. El gato es un animal muy habitual que podría acusar de algunas situaciones como una mudanza, un viaje, un período de estar fuera de casa.
Evidentemente se trata de una patología puramente psicológica. Para remediar inicialmente y evitar que el gato se lastime, se sugiere el collar “Elisabetta”, que evita que el gato se lama y permite que la piel se regenere.
Además de esto, los propietarios deben rastrear la causa del estrés también a través de varias señales enviadas por el gato (haga clic aquí) Después de haber identificado con el veterinario el tipo de dermatitis, una vez comprobada la que deriva de factores nerviosos, se debe abordar la condición psicológica del gato. Una vez identificado el factor que causa malestar al gato, por lo que el dueño tenderá a evitar someter al gato a esa situación, se debe apoyar al animal y ayudarlo a superarlo. Por tanto, será útil hacer frente al hecho y superar esa situación.
En algunos casos, la terapia también puede requerir un tratamiento farmacológico con tranquilizantes, cuya dosis se controlará periódicamente con el veterinario y se irá reduciendo gradualmente.
En cuanto a las lesiones, si son superficiales deben tratarse localmente. Si las heridas son más profundas, es posible que se requiera tratamiento con antibióticos.