Cuidador de gatos o alojamiento de gatos: ¿dónde dejar al gato? Comparación y consejos

Si estás a punto de irte de vacaciones y no sabes si confiar a tu gatito a un cuidador de gatos o a un internado, esto es lo que debes saber.

La planificación adecuada de las vacaciones no puede dejar de incluir una consideración cuidadosa de dónde dejaremos a nuestro querido amigo de cuatro patas. Durante la estancia, es mejor confiar el gato a un cuidador de gatos o elige uno gato de embarque? Descubramos los pros y los contras de ambas opciones juntas.

Cuidador de gatos o pensión: ¿cuál elegir?

A diferencia de los perros, los gatos son animales de costumbres, que apenas toleran el estrés derivado de los cambios.

Felino tirado en el sofá
(foto de pixabay)

Por eso, aunque desees fervientemente emprender un viaje sin renunciar a la compañía de tu amado gato, también debes considerar las necesidades del amigo peludo.

Por supuesto, no todos los felinos odian viajar: hay algunos ejemplares, de hecho, que se prestan perfectamente para hacer un viaje en familia.

En el caso de que, no obstante, tu gato no sea uno de estos, será necesariamente necesario confiarlo al cuidado de alguien que lo cuide en nuestra ausencia. No todos tienen la oportunidad de dejárselo a familiares y amigos que estén a la altura.

En este caso, por tanto, la elección puede centrarse en dos alternativas: cuidador de gatos o alojamiento de gatos.

También te puede interesar: Responsabilidad del cuidador de gatos: lo que establece la ley

Cuidador de gatos: pros y contras

El cuidador de gatos es una figura que acude habitualmente a nuestra casa para satisfacer las necesidades primarias del felino: alimentarlo, llenar su comedero con agua fresca, limpiar el arenero y mimarlo durante unos minutos.

Felino en manos del dueño
(foto de pixabay)

Entre las indudables ventajas que se derivan de elegir sus servicios está que el gato no tiene que moverse de su casa, experimentar estrés adicional.

Después de todo, nuestro alejamiento temporal ya se encarga de hacerlo sentir inseguro. Por eso, hacerle pasar los días de nuestra ausencia en casa le ayudará a soportar mejor la distancia con nosotros.

Otro motivo que nos debe hacer inclinarnos por esta elección es que el cuidador de gatos tiende a ser fijo: tras una primera experiencia en su compañía, por tanto, el amigo de cuatro patas habrá tenido la oportunidad de entablar amistad con nosotros y se sentirá más seguro en caso tengamos que volver a hacer uso de sus servicios.

Entre las desventajas de elegir al cuidador de gatos está que muchas veces es una persona sin especialización en el cuidado del gato. Por eso, el proceso de selección debe ser muy cuidadoso: no solo le daremos las llaves de nuestra casa a un desconocido, sino que le confiaremos a nuestro querido amigo de cuatro patas.

También te puede interesar: Cómo elegir el cuidador de perros o gatos perfecto para tu mascota (Video)

Alojamiento de gatos: ventajas y desventajas

Ahora que hemos examinado los pros y los contras de elegir un cuidador de gatos, descubramos las ventajas y desventajas de confiar a nuestro bebé a una pensión para gatos.

gatos abandonados y rescatados (Foto Pixabay)
(foto de pixabay)

En primer lugar, es una estructura certificada, equipada con personal especializado. Por esta razón, podremos elegir el mejor también con la ayuda de las reseñas de quienes han utilizado este servicio antes que nosotros.

Además, las casas de huéspedes para gatos suelen ser equipado con un veterinario dentro de la estructura y también ofrecen actividades de ocio para el gato, como juegos y paseos en lugares abiertos, pero seguros.

¿Cuáles son los contras de esta elección? En primer lugar, el gato tendrá que salir de su entorno para situarse en un nuevo contexto. Además, es posible que el cuadrúpedo no aprecie en absoluto la presencia de otros gatos.

En definitiva, la elección de una u otra opción no es única, sino que depende mucho del carácter del amigo peludo y de sus necesidades.

No hay duda: considerando los factores enumerados anteriormente tomaremos la mejor decisión, dejándola en buenas manos. Después de todo, ¿quién lo conoce mejor que nosotros?