¿Cómo regañar al gato de forma eficaz?

¿Cómo regañar al gato? Consejos útiles para educar eficazmente al gato y aprender a regañarlo cuando sea necesario, teniendo en cuenta su espíritu independiente y algo rencoroso.

¿Cómo y cuándo regañar al gato para educarlo eficazmente?

Educar a tu gato también puede significar tener que regañarlo cuando no se comporta como debería en casa. Por supuesto, no puedes pensar en regañar al gato de la misma manera que lo haces con un perro, porque estos dos animales tienen personajes totalmente diferentes.

El gato es un espíritu libre e independiente, que a veces se comporta mal según nuestros cánones pero que en su pensamiento no está haciendo nada malo, si no siguiendo sus propios instintos. Entonces, ¿cómo regañar al gato de manera efectiva?

Lo primero que hay que entender cuando se trata de aprender a regañar al gato es lo siguiente: se puede educar al gato para que viva en el interior, pero hay una parte de su instinto más salvaje que nunca desaparecerá. ¡Los dueños de gatos deben, por lo tanto, armarse de mucho amor y paciencia!

Cómo regañar al gato: cuándo no y cuándo es necesario

regañar al gato
Regañar al gato: ¿cuándo se necesita y cuándo no?

En la educación del gato es necesario distinguir los comportamientos que son un instinto natural de los que deben corregirse. En el primer caso es importante educar al gato adoptando soluciones ad hoc, en el segundo caso es necesario regañar al gato pero de la forma correcta y eficaz.

Si el gato destroza los muebles, este es su instinto de supervivencia porque arreglarse las uñas es una forma de combatir el estrés y relajarse: una vez que comprenda por qué su gato rasca los muebles, intente resolver el problema con un poste rascador.

Si el gato te muerde es realmente difícil de atacar: muchas veces somos nosotros quienes, sin darnos cuenta, hacemos algo que le molesta. Averigua por qué tu gato muerde y no lo regañes, también porque muchas veces son los dueños los que le permiten hacerlo de gatitos y por eso son ellos quienes le enseñaron.

Si el gato no usa la caja de arena, hay una razón que depende del instinto: tratar de entender qué le molesta o qué le lleva a hacer sus propias necesidades en otra parte y encontrar la solución adecuada sin regañarle.

Si en cambio el gato se está portando mal o está haciendo daño en la casa, puede valer la pena reprocharle su comportamiento: para aprender a regañar al gato hay una regla fundamental que atañe al tiempo.
El gato debe ser regañado en el momento en que está haciendo algo malo, o no podrá conectar el comportamiento incorrecto con el regaño, al igual que con los perros.

Pero, ¿cómo regañar al gato en la práctica? Cuando pillas a tu amigo felino en el acto, regañarlo diciendo «¡No!» con voz firme y decidida. Y repita su «¡No!» siempre que sea necesario, hasta que el gato se dé cuenta de que el comportamiento es incorrecto.

Finalmente, nunca use métodos violentos con el gato o con cualquier otro animal: maltratar al gato no le enseña nada y empeora tu relación con él, hasta el punto de que puede atacarte o empezar a asustarte. Es mucho mejor utilizar el refuerzo positivo para educar a tu gato de manera eficaz.

CB