Cómo enseñar a nadar a tu perro: razas que aman y no les gusta el agua
Se acerca el verano y es hora de preparar a nuestro compañero de 4 patas para nuevas aventuras
Nadar a diferencia de los clichés no es un movimiento innato en el perro. No todos los ejemplares tienen el reflejo de mover las piernas para flotar en el agua. En realidad, es una experiencia que debe ser gradual y aprendida por el perro. Como en cualquier disciplina nueva, el perro debe ir acompañado paso a paso, con paciencia y calma en el aprendizaje.
Algunas razas que aman el agua
Al igual que entre los humanos, algunas razas son más acuáticas y tienen una predisposición no solo genética sino también morfológica apta para la natación como las «patas palmeadas» o que tienen tejido entre los dedos y que no es común a todas las razas.
Sin embargo, todas las razas de perros pueden aprender a nadar.
Entre los perros más conocidos como nadadores se encuentran el Labrador Retriever, Golden Retriever, Newfoundland.
No en vano, se trata de ejemplares que siempre hay que vigilar cerca de un río, un arroyo, un lago, pero también fuentes. La atracción por el agua es más fuerte que cualquier otra cosa.
A estas razas más conocidas, sumamos el American Water Spaniel, el Barbet, el Cao de Agua Portugues, el Irish Water Spaniel, el Lagotto Romagnolo, el Perro de Agua Español y el Dutch Spaniel (todos en las imágenes)
Razas a las que no les gusta nadar
A diferencia de las razas más acuáticas, otras razas tienen una morfología menos apta para la natación y la lucha. Estas son razas que tienen un pecho más ancho y patas cortas. Incluso las razas de perros braquicefálicos o que el llamado «hocico aplanado», como Carlini, yo Boxer O Bulldog inglés o la variante bulldog francés pero también pequinés. No nadan con facilidad porque no pueden mantener el hocico y la nariz fuera del agua. Para ello levantan la cabeza hacia arriba y en este caso, la parte posterior del cuerpo tiende a ir hacia abajo.
Lo mismo se aplica también a las razas de perros que tienen una estructura ósea pesada y una cabeza desproporcionada al cuerpo, incluidas las razas como el perro salchicha o el basset hound que también tienen patas demasiado cortas.
Las razas como el Staffordshire Bull Terrier tienen una constitución pesada y una cabeza desproporcionada, por lo que tienen dificultades para nadar.
Enséñale a nadar al perro
El perro debe descubrir juguetonamente el contacto con el agua. Tiene una percepción diferente a la del hombre también de la profundidad. Por eso es bueno pensar en algunos trucos para ayudar al perro a entrar gradualmente en contacto con el agua. Pueden comenzar como cachorros, tan pronto como se hayan completado todas las vacunas necesarias.
En primer lugar, elija el lugar más adecuado y adecuado donde el perro pueda entrar al agua sin sufrir traumatismos.
- Evite los arroyos profundos donde hay demasiada corriente y agua profunda que podría traumatizar al perro.
- Prefiere un arroyo de cálamo, con un banco donde el animal pueda ingresar progresivamente al agua
- Presta atención a la temperatura del agua y que afuera, debe ser suave.
- Evita tirar al perro al agua
- Asegúrese de que el perro, sin correa o con correa extensible, sea libre de explorar el lugar por sí mismo y acercarse a la orilla, sin interferir
- Tan pronto como se moje las patas, anímelo con cumplidos.
- Nunca le grites al perro. Repite el enfoque con calma
- El enfoque se puede repetir hasta diez veces antes de que el perro se familiarice con el agua.
Es fundamental asociar las primeras experiencias con un evento positivo. Sea un ejemplo para el perro, ingresando al agua usted mismo, inicialmente mojando solo sus pies, asegurándose de que el perro se familiarice gradualmente con el agua.
Ayuda al perro a nadar
Una vez que el perro parece estar cómodo, el siguiente paso es lograr que el animal interactúe en el agua. arrojar algo al agua y hacerlo flotar. Como un juguete para perros o una pelota. Colóquelo lo más cerca posible del animal, de modo que sea tentador alcanzarlo. Si el juego se lanza demasiado lejos, puede desanimarlo.
Después de eso, avanza progresivamente hacia el agua, alcanzando un mayor nivel de profundidad donde el perro no tiene forma de tocar el fondo.
En este punto, pueden ocurrir varias reacciones.
- el perro comienza a mover sus patas instintivamente
- otros especímenes podrían moverse frenéticamente, cansándose e incluso tragando agua.
Si el perro tiene dificultad para nadar
Si su perro tiene dificultades para flotar, puede ayudarlo.
- Coloque una mano debajo del pecho y la otra debajo del abdomen.
- Observa el progreso del perro. Tan pronto como comience a flotar y nadar, déjelo por unos momentos
Repita el ejercicio hasta que el perro demuestre confianza.
En esta delicada fase, se debe tener cuidado de no empujar al perro a un lugar peligroso. Nunca fuerce al animal que debe ser respetado. Al contrario, anímelo haciéndolo divertirse.
Unos días serán suficientes para que el perro se familiarice con que tendrá que nadar de forma completamente natural.
Beneficios de la natación para el perro
La natación es un buen ejercicio para el perro. Fortalece el corazón y los pulmones y estimula los músculos. No cansa las articulaciones y no las desgasta.
Es un deporte ideal para cachorros en desarrollo y para perros con problemas articulares.
La natación no solo ayuda a los perros obesos a perder peso, sino que los lleva a hacer ejercicio sin sobrecargar sus articulaciones.
Esta es una actividad recomendada para la rehabilitación de perros que han sufrido lesiones.
La natación es un momento de diversión para el perro, mejora la socialización y fortalece la confianza del animal en el dueño.
¿Podría ser interesante para ti?
-> Las razas de perros con excelente calidad de agua. ¡Imposible mantenerlos secos!
-> Acquapark y piscinas donde puedes traer a tus perros a divertirse en Italia
Amoreaquattrozampe ha sido seleccionado por el nuevo servicio de Google News, si quieres estar siempre actualizado con nuestras novedades SÍGUENOS AQUÍ