¿Cambios de temporada? Cómo ayudar a nuestro perro
Nuestros queridos y amados compañeros de cuatro patas sufren como los humanos cambios de temporada. Si en las estaciones más cálidas hay algunos trucos en los que pensar (haga clic aquí), cambiando los ritmos y la dieta, incluso en los períodos más fríos hay elementos a considerar para ayudarlos a sobrellevar mejor las bajas temperaturas.
En primer lugar, hay que tener en cuenta que los cambios de temperatura no son saludables tanto para perros como para gatos. La transición de una casa ultracalentada a una al aire libre a menudo conduce a pequeños problemas de salud para nuestros amigos de 4 patas.
Y entonces pasear al perro en invierno es bueno evita las horas frías, prefiriendo los momentos más céntricos del día. Para los cachorros más pequeños pelosi O no peludo y en base a la edad del animal, puede ser importante y necesario pensar en una Saco además impermeable para protegerlos de la lluvia y reducir la aparición de artritis en especímenes más viejos.
Además, en el otoño el perro tiende a cambiar el cabello, poniendo un cabello más grueso y más largo. Para permitir el crecimiento de este cabello, también tendrás que cepillar a nuestro amigo de cuatro patas con más frecuencia y a fondo, para que el de abajo pueda crecer más fuerte y contener el molesto fenómeno de la caída del cabello. (haga clic aquí)
Además favor una sana actividad física al perro, con lo que se estimula la circulación, a diferencia del período estival en el que se reduce el esfuerzo físico, durante los cambios de estación también dieta alimenticia de nuestras mascotas de 4 patas deben ser modificadas según las diferentes condiciones climáticas que requieran un aporte energético diferente. El propio organismo del perro requiere aumento de la ingesta de alimentos. Por eso, en otoño, el perro debe asimilar una mayor ingesta de proteínas y por tanto comer más carne, preferiblemente la blanca que se puede alternar con pescado una vez a la semana.
Además, para afrontar mejor la temporada invernal, el perro debe recibir suplementos vitamínicos, como A, E, B, C y Biotina, pero también minerales como Cobre, Zinc, Selenio y Omega 6 y 3.