5 asesinos silenciosos que podrían acabar con tu gato: cómo reconocerlos a tiempo

Si prestamos atención a algunas señales importantes, le guardaremos la vida: cuáles son los 5 asesinos silenciosos que podrían acabar con el gato.

Enfermedades que pueden matar al gato
Gato gravemente enfermo (Canva)

No siempre es fácil predecir los problemas de salud de nuestro querido felino doméstico, sin embargo hay que estar atento a estos 5 enfermedades mortales que pueden matar silenciosamente a nuestro gato o en todo caso comprometer inevitablemente su salud. Por ello es absolutamente necesario velar por que se conserve su salud y que a las primeras señales que nos mande su cuerpo tomemos medidas serias.

¿Cómo sabemos si un gato no está bien?

Un dueño atento, aunque sea un principiante, podrá aprender fácilmente a comprender cuándo su gatito no se siente en buena forma y ciertamente tomará medidas para resolver el problema. Aunque no tengo el uso del habla, el felino es ciertamente capaz de ‘hacerse entender’: en primer lugar, no se comporta como de costumbre, es diferente y tiende a quedarse aún más aislado que de costumbre.

gato enfermo
Cuidando al gato (Canva)

Sus orejas y cabeza están inusualmente bajas, mientras que su bigote está levantado, sus ojos no están muy abiertos, como si el dolor fuera demasiado intenso para no darle la fuerza para mantenerse alerta. Es probable que sufra pérdida de apetito, insomnio, que se deje llevar por maullidos de dolor y que no realice sus acciones diarias, como acicalarse o cuando el gato se lame.

5 asesinos silenciosos que podrían matar a tu gato lo que son

Pero entonces, ¿cómo entendemos los primeros síntomas de las enfermedades más peligrosas para su salud y sobre todo cuáles son? Aquí hay 5 que pueden llevar a la muerte de nuestra querida mascota (si no se trata a tiempo, por supuesto).

Terapias para Micio
Medicamentos para curar Gatito (Canva)

Hipertiroidismo

En el gatos mayores de 8 años, puede ocurrir que esta enfermedad se produzca provocada por una actividad excesiva de la glándula tiroides, que produce las hormonas tiroxina y triyodotironina, con consecuencias devastadoras para el organismo. Los gatos que sufren muestran signos de:

Por suerte existen curas: consiste en la administración de un fármaco (metimazol), una dieta especialmente diseñada para gatos con hipertiroidismo y, en definitiva, la extirpación de las glándulas tiroides mediante cirugía.

Problemas del corazón

Aunque pueda parecer una definición genérica, se refiere al soplo cardíaco que normalmente no sufren los gatos (a diferencia de los perros). Esto conduce a una aceleración del ritmo cardíaco, aumento de la frecuencia respiratoria, problemas en las piernas (rigidez, extremidades frías, dolor en la zona, cojera).

Incluso esta enfermedad, si no se trata a tiempo, puede matar a Micio y lamentablemente no existe una cura que ‘resuelva’ por completo el problema, pero los tratamientos disponibles (diuréticos, oxigenoterapia y medicamentos) pueden evitar que empeore.

Cáncer gastrointestinal

Es uno de los asesinos más peligrosos para la salud del gato, ya que sus síntomas pueden parecer genéricos y, por lo tanto, difíciles de identificar. De hecho, un gato enfermo presenta letargo, pérdida de peso y rastros de sangre en el vómito y, en general, una sensación de malestar generalizado.

Lleva al gato al veterinario.
Gato en el veterinario (Canva)

Se puede diagnosticar mediante: análisis de sangre, radiografía, gastroscopia y cirugía exploratoria. Lamentablemente ni la quimioterapia ni la radioterapia han dado grandes resultados y se piensa que la mejor solución es la cirugía, también para descartar la presencia de otras adherencias.

Usted también podría estar interesado en: Descubre los gatos con mayor riesgo de enfermedad renal: las razas de gatos más propensas

Diabetes mellitus

Muy frecuente en gatos, implica una concentración excesiva de glucosa en sangre; La diabetes mellitus en gatos puede ser de tipo I o de tipo II, e implica una descompensación metabólica más o menos grave en el gato, denominada cetoacidosis. Los gatos que la padecen suelen ser machos, con problemas de peso, castrados y mayores.

Usted también podría estar interesado en: ¿Averiguar si los perros y gatos reconocen enfermedades? La respuesta de la ciencia.

Los síntomas más comunes son:

Al igual que en los humanos, la enfermedad se trata con la administración de insulina, incluso dos veces al día, con controles de azúcar en sangre y visitas frecuentes al veterinario. No es una terapia barata pero podría guardarle la vida.