¿Perros en casa con bebés? Reducen las alergias y el riesgo de obesidad en los niños
Un nuevo estudio de un grupo de investigadores de la Universidad de Alberta en Canadá, publicado en la revista Microbioma destacó los beneficios para la salud derivados de la presencia de un animal, en concreto un perro, desde la infancia.
Los investigadores encontraron que los bebés y los niños criados en un ambiente hogareño con un perro tienen menos riesgo de desarrollar ciertas alergias o volverse obesos. Según el estudio, la presencia de un perro elevaría la fauna bacteriana intestinal en los niños: “La abundancia de estas bacterias se multiplica por dos cuando hay un animal presente”, explicó el epidemiólogo y autor de la investigación. Anita Kozyrskyj, por lo que se produciría un intercambio de las defensas inmunitarias entre el recién nacido y el perro, incluso indirectamente durante el embarazo y en los primeros tres meses de vida del niño.
El estudio se basó en el análisis de las heces de una muestra de 746 lactantes, para lo cual se demostró que la exposición a suciedad y bacterias derivadas de la presencia del perro ayuda a fortalecer las defensas inmunológicas en el niño.
Este estudio da seguimiento a las hipótesis planteadas por David Statchan, profesor de epidemiología y director asociado del Research Institute de Londres. Statchan desde 1989 ha destacado cómo la aparición de alergias en los niños se deriva de un entorno demasiado aséptico.
En varias ocasiones se ha destacado el aporte beneficioso de un animal sobre la salud de los niños pero también su utilidad en su desarrollo psicológico. De hecho, la presencia de un perro ayuda a los niños en su autoestima, a ganar confianza y a ser más responsables. Varias búsquedas también tuvieron demostró que un animal ayuda a estimular las facultades empáticas, habilidades cognitivas fundamentales en la socialización, haciendo que los adultos sean más responsables, sensibles y compasivos. Sentimientos que son la base de las relaciones y necesarios para el equilibrio psicológico de una persona. No es sorprendente que las personas que han sido violentas con los animales en la niñez tengan más probabilidades de convertirse en peligros para la sociedad.